Manwë. Arda entera sería su dominio, y su principal creación sería el elemento del Aire, y por ello se lo llama Súlimo, Señor del aliento de Arda. Y su idea fue lo que los Eldar acabaron denominando BARASARNATH. Y tan grande emoción tuvo que compartirla con sus hermanos. Y sus hermanos admirados y complacidos, trabajaron en ella. Y así surgieron más elementos: el fuego fue creado por Vàna, el Agua por Ulmo y la Tierra por Aüle.
Pero también de ahí vino el temor de Yavanna...
Pero en su cabeza también había otro elemento, mucho más complejo. Y como la dedicación a menesteres más importantes le impedía su plena dedicación a ello, pidió ayuda a Yavanna. Era la única relativamente desocupada y capaz de semejante proeza. Así fue como Kementari dirigió a otro grupo de Hermanos en esa nueva y emocionante Melodía que los Eldar acabarían llamando HAMMENNATH.-La idea es hermosa, Hermano. Pero desgraciadamente, frágil. Pues ya sabes que será vulnerable a la obra de Vairë. Y además siento una Irrupción que en combinación con la obra de nuestras Hermanas le hará daño. Y temo por ella. Hablé con Irmo y corrobora mis temores. Aunque nada más sabemos, y desde que Vairë nos mostrara el Tobanath no hay nada claro para nosotros; únicamente para Ilúvatar.
-Lo sé, Hermana; y yo también comparto esos temores. Y también sé que tu labor es la más difícil de todas. Pues sólo con el máximo de los amores podrá desarrollarse esta nueva Melodía, y además, será la creación más frágil. Y cuanto más amor pones en algo mayor es el dolor cuando se destruye. Y el Tobanath de Vairë hará eso posible.
-¿Y dices que nuestro Padre está conforme?
-Eso mismo digo.
-Entonces así sea. No es quién un simple espíritu para cuestionar la voluntad del Único.
Así, visto el daño que se avecinaba, pues Irmo era muy sensible a ese tipo de sutilezas (intuyéndolo en su Padre Ilúvatar), encomendó a Estë que trabajara en algo que mitigara dicho daño. Todavía no se sabía de dónde ni cómo vendría pero podía intuirse y apaciguarse. Así que Estë, guiada por Yavanna, trabajó en esa nueva Melodía de la que Irmo le habló.
Los Eldar lo acabaron llamando Reposo; los naugrim, regeneración y los Hombres, curación. Y formaría parte de lal Hammennath, que Manwë ideara y que Yavanna llevara a cabo con tanto Amor como Pesar. Y que tanto daño sufriría algún día: en los albores del Tiempo con Morgoth y al final con el Hombre.
-No te preocupes, Hermana. Trabajaré incansablemente hasta que todo lo que pueda ser dañado pueda recuperarse; mas me temo que si es completamente destruido nada podrá hacer mi Poder ni mis intenciones.
-Sin duda, tenerte a mi lado me dará las fuerzas suficientes para crear esta Obra que divide mi corazón pero que tan necesaria es para el equilibrio de Eä. Sé que sufrirá. Y yo más que nadie. Pero tu denodado esfuerzo a mi lado compensará cualquier daño que pueda ser causado.
-Todas las gracias del Mundo son contigo, Hermana. Yo siento exactamente lo mismo. Pero también has de saber que nuestros más Fuertes Hermanos, viendo tu pesar, se han ofrecido para cuidar de tu frágil obra... Si Oromë y Tulkas velan por ella nada debes temer... ¿quién podría dañarla?...
Yavanna se alegró levemente para confianza de su pequeña Hermana Estë, pero no pudo regocijarse... ¿Qué inquietaba al imperturbable Irmo?...
...En los albores del Tiempo (y nunca mejor dicho), la obra de Vairë seduce a Melkor...
-Sin duda, tu obra es la más brillante de todos los Hijos de Eru, querida Hermana. Y más me gustaría estar a tu lado que al lado de Irmo, o de mi queridísimo Hermano Manwë.
-Sé que hablas de corazón, Hermano. Y que comprendes y valoras mi obra como ninguno, pues nadie se ha interesado tanto como tú por ella.
-Pues has de saber que he pensado mucho en ella y es de una beatitud sublime. Y he tenido algunas ideas al respecto, si me permites. Ideas que Eru no permitiría.
-Me confundes, Hermano. ¿Qué puedes haber imaginado para mi obra que nuestro Padre no tolere?
-Gassathnath [Agujeros], mi amada Hermana... podremos movernos por toda Eä sin tener que desplazarnos por el espacio de Varda. No necesitaremos a Varda ni a Eru.
-Agujeros... pero eso es imposible: la esenecia del Tobanath es hermética... es fascinante, sin embargo eso de lo que me hablas, y no sé... hermoso. Francamente, no creo que eso vaya a enfadar a nuestro Padre...
Así, Melkor seduce a Vairë, interesándose y manipulando su obra. Crea los Agujeros Negros. Agujereando el Espacio-Tiempo de Varda y Vairë, mas no acaban de saber exactamente cómo lo hace. Vairë se ve atraída por Melkor. Por lo brillante de su creatividad y por el interés en su música. Por su talento y su dedicación. Ha de saberse también que Melkor siempre estuvo muy cerca de su Hermano Manwë. Y también que la rutilante Varda estaba muy cerca de Manwë.
Entretanto, concebidos el BARASARNATH y EL HAMMENNATH, el paulatino desarrollo de Arda fue relativamente fácil y entretenido. Y hermoso. Y cada nueva idea daba vida a una nueva forma de Beatitud. Manwë e Irmo guiaban al resto mientras Varda y Vairë observaban desde fuera. Y mientras, Melkor, que estaba muy cerca de Irmo también conocía todos los pesares que se avecinaban...